lunes, 8 de noviembre de 2010

Las empresas obvian el potencial de los medios de comunicación sociales

El 75% de las empresas que usan medios sociales no sabe ni dónde ni qué se está hablando de ellos.

A pesar del enorme potencial que suponen los medios sociales, muchas empresas todavía no han sabido sacar el verdadero jugo ni aprovechar como fuente de información todo lo que dicen sus seguidores y consumidores. Aferrados a viejas ideas, utilizan los medios de comunicación social para, unidireccionalmente, dar mensajes de marketing sin prestar atención a las conversaciones, obviando la monitorización y el análisis de lo que se dice de ellos.


Esta es una de las conclusiones del estudio patrocinado por SAS, proveedor de analíticas, y realizado por Harvard Business Review Analytic Service que se ha encargado de entrevistar a 2100 compañías. De las empresas encuestadas más de la mitad utilizan los medios sociales pero, el 75%, no sabe ni dónde ni qué se está hablando de ellos y tan sólo el 23% utilizan herramientas de análisis para monitorizar los medios sociales. Otro dato sorprendente es que, únicamente el 7%, está intentando integrar esta nueva área dentro de su estrategia de marketing global.

Para el experto en analíticas Tom Davenport “las empresas están perdiendo grandes oportunidades de comercializar productos y gestionar su reputación ya que no saben quién está hablando sobre sus marcas, productos o servicios ni si lo hacen de forma positiva o negativa. No pueden valorar cómo influyen las opiniones de esos consumidores ni aprovechar a esos grupos para testar videos, mensajes corporativos… En definitiva, están perdiendo oportunidades de marketing”.

Las empresas saben que tienen que estar presentes en los medios sociales pero su empeño se centra en hacer ruido, más del 50% de los entrevistados, dejando de lado el participar y entender las conversaciones que generan. Sólo un tercio de los encuestados cree que su estrategia está funcionando, dato que puede estar sesgado ya que no utilizan herramientas de análisis para saberlo. El 30% busca incrementar el tráfico hacia sus páginas web pero sólo el 29% de los entrevistados se preocupa por recopilar información sobre las reseñas que hacen sus clientes en internet.

A pesar de lo negativo de los resultados de este estudio, las compañías son conscientes de que es necesario un cambio por su parte. De esta manera, el 36% prevé realizar estudios de conducta de sus clientes en los próximos dos o tres años, el 33% planea utilizar soluciones de monitorización de los medios sociales y el 26% empezará a medir el impacto de las conversaciones que se producen en la red. Todo esto unido a la integración con la estrategia global de la compañía permitirá no saber únicamente qué se dice de las empresas sino quién lo dice y qué impacto tiene.

Autor: PuroMarketing

La cara más humana del mercado de juego online

Autor:  E. Arrieta

Las apuestas online en España mueven 575 millones de euros y 200.000 jugadores al año. Un negocio que no siempre se ha asociado a la moralidad (existe un debate en torno a la conveniencia de permitir publicidad de firmas de apuestas en equipos deportivos) y en el que sorprende una compañía sin ánimo de lucro, Paf.

Esta empresa, de capital público, poseía hasta la llegada de Internet el monopolio estatal del juego y las apuestas en su territorio natal, Åland, un espacio conformado por 6.000 islas, con un marco político semiindependiente de Finlandia. Al margen de los casinos presentes en Åland, Paf fletaba ferries-casino por medio mundo, actividad que aún mantiene.

Internet

En la actualidad, la mayor parte del negocio procede del juego online. “Creamos el portal web en 1996, cuando Internet era un medio aún incipiente. Nuestro primer cliente procedía de Asia, y eso nos hizo caer en la cuenta del potencial internacional de la Red”, afirma a EXPANSIÓN Anders Ingves, consejero delegado de Paf.

La compañía escogió España para abrir su primera oficina fuera de las fronteras nórdicas, en 2009, en la que hoy trabajan cuatro personas. “España es un mercado de gran potencial, con unos hábitos muy arraigados para juegos como la lotería”, declara Ingves. Pero advierte: “La regulación del juego online es indispensable, siempre que ésta no limite las licencias. Sólo así se logra la transparencia y se evitan ciertos abusos”.

El año pasado, la facturación de Paf ascendió a 88 millones de euros, de los que casi veinte millones se destinaron a acciones de tipología social. Concretamente, unos doce millones se dedicaron a evitar la adicción al juego de los propios clientes de Paf. “Cuando alguien gana más de 25.000 euros, le llamamos por teléfono y le damos una serie de consejos para evitar que se enganche y que malgaste el dinero”, explica el primer ejecutivo de la compañía. Los consejos más habituales tienen que ver con no contar a otros la cuantía ganada “hasta que la persona no interiorice lo ocurrido. Les pedimos que dejen de jugar durante un tiempo y les proporcionamos asesoramiento financiero si lo requieren”, agrega Ingves.

Proyectos

Los siete millones de euros restantes, que figuran en la cuenta de resultados como el beneficio neto, se destinan a apoyar proyectos para el bienestar social en Åland y organizaciones sin ánimo de lucro.

En España, Paf tiene como socia a la Fundación Atlético de Madrid, con la que colabora en varios proyectos como, por ejemplo, la reconstrucción de un hogar para madres solteras primerizas en la ciudad de Rosario (Argentina).